jueves, 28 de octubre de 2010

MI CALAVERITA

MI CALAVERITA

Los alumnos asustados
en el pueblo se escondían
mientras que los profesores
a carcajadas se reían.

Pero ellos no sabían
la que les esperaba
pues los maestros en venganza
de la tumba retornaban.

Estaban los alumnos de tics  trabajando en su salón,
Cuando llegó la Flaca causando distracción
Pues a platicar a todos los invitó,
Pero los alumnos, con su silencio, la corrieron del salón,
Y la mandaron de regreso a platicar a su panteón.

Estaba el profesor hermilo
Su clase de tics dando
Cuando le aparece la calaca
 en el face paseando

¡Qué tristeza se respira hoy en nuestra Institución!
pues a todos los maestros, la calaca recogió
Y con saña consabida su tumba les preparó.
 Ya el profesor hermilo al campo santo llegó
Llevándose sin temores a los de tics reprobó.
                                                                           Al  profe y alumnos de tics
la muerte se lo llevó
una  inundación en la universidad
con sus vidas acabó.
En la clase de tics 
La muerte se les apareció
Era el profe hermilo
Que con su CPU salió.
El profe Hermilo
Pase de lista estaba haciendo
Cuando vio a la huesuda
De la clase saliendo.

El profe hermilo
A los alumnos de tics reprobó
Todo porque la muerte
En la noche su casa robo.

Ni el face ni MSN
Hermilo a los alumnos pudo prohibir
Pero la huesuda de un grito
Del face y msn los hizo salir.

miércoles, 27 de octubre de 2010

LAS CALAVERAS

Son palabras populares en forma de rimas escritas de manera chusca, divertidas, satíricas y críticas donde se hace referencia a alguna cualidad o defecto de un personaje o de asuntos de interés general o que están de moda, irreverentemente y con una escritura ligera. Comenzó para burlarse de la propia muerte, pero después se amplió a políticos, funcionarios y otros personajes públicos. Son especialmente frecuentes y valoradas en México formando parte importante de la tradición de Día de Muertos.
Tienen su origen con los epitafios de Jorge Manrique (1440-1479), las primeras calaveras se publicaron en la segunda mitad del Siglo XIX, a modo de caricaturas. Estas imágenes fueron acompañadas con versos, en los que se describían de manera jocosa los motivos de su muerte.
Entre las composiciones populares más originales de los mexicanos figuran las "Calaveras", escritas en versos de métrica y rima libres en "honor" de alguna persona o de muertos célebres, y que se elaboran, por tradición, en el meyugtuis de noviembre, durante la fiesta de los difuntos.

Las “calaveritas” constituyen, desde hace mucho tiempo, parte del folklore urbano vinculado a los festejos de Días de Muertos. Actualmente, resultan casi inseparables del clima generado por las calaveras de azúcar con ojitos de papel brillante, el pan de muertos, las calacas móviles, los juguetes y miniaturas populares con esqueletos y el papel calado con motivos afines.Este divertimento literario fue perfeccionado durante la época colonial y abreva, como todo lo vinculado al tema, en el sincretismo entre creencias prehispánicas y conceptos traídos por los conquistadores y reafirmados por los frailes evangelizadores. Si bien el culto a los muertos existe en todas las sociedades, la concepción mexicana es producto de ideas existentes en pueblos españoles del siglo XVI que se fundieron con costumbres y creencias indígenas que la evangelización no consiguió desarraigar. Este proceso confluyó en las especiales características que la fiesta posee en la actualidad.Las “calaveritas” son versos populares breves, por lo general satíricos y burlones, mediante los que se ironiza sobre algún individuo o personaje al cual van dirigidos. Están escritos a modo de epitafios y es muy común tratar al aludido como muerto, vinculándolo a expresiones cómicas de su actividad, profesión, cargo o atributo, con absoluto desenfado por su poder o posición social.Al acercarse las festividades de Días de Muertos - que en la tradición mexicana se realizan durante varios días, incluyendo el del santoral católico Fieles Difuntos del 2 de noviembre – es cuando se dirigen éste tipo de mensajes hacia los personajes públicos. Los versos son reproducidos en la actualidad en revistas y periódicos o difundidos por programas radiales. Antiguamente sin embargo, fue tradicional hacerlos conocer a través de hojas sueltas. Entre las más famosas de esas hojas volantes estuvieron, entre fines del siglo XIX y comienzos del XX, las elaboradas en la imprenta de Vanegas Arroyo ilustradas por el grabador José Guadalupe Posada.En aquel momento de profundos cambios sociales y aguda represión a sectores populares que reclamaban justicia y libertad, no por casualidad tuvieron su auge éstas expresiones.